Cerebro de plástico

LA SERPENTINA

POR GUILLERMO AGUIRRE

Cerebro de plástico

**Pues aunque usted no lo crea, el plástico ya invadió el cuerpo humano, muestras de cerebro humano del 2024, encontró casi un 50 por ciento más de micro y nanoplástico, en el cerebro, que las muestras de 2016, y lo peor a las personas con más alto contenido de plástico en el cerebro, se les diagnosticó, demencia

A propósito de las jornadas de saneamiento que hoy sábado se realizarán para darle una manita al río Mololoa, y a propósito del enorme problema que representa la modernidad en materia del uso de envases, llegando a ser un problema no solo en el medio ambiente, sino que ahora, también en el ser humano.

Les quiero compartir esta publicación mundial para que nos asustemos, pero el susto en sí mismo no tiene ningún provecho sino hacemos algo para evitarlo.

El asunto es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) aunque no afirma específicamente que el plástico represente el 50% de la contaminación, sin embargo, lo que la OMS sí ha destacado es el impacto de la contaminación plástica, que afecta la salud humana y el medio ambiente. Por ejemplo, la OMS ha alertado sobre la presencia de microplásticos en el cuerpo humano, incluso en el cerebro, y cómo esto podría estar aumentando con el tiempo.

La contaminación plástica es un problema global que tiene diversas facetas:

El plástico de un solo uso: Representa una gran proporción de la producción total de plástico, y a menudo termina en los océanos.

Impacto en la salud: La exposición a microplásticos puede tener efectos en la salud humana.

Contaminación del medio ambiente: Los desechos plásticos contaminan los ecosistemas acuáticos y terrestres, afectando a la vida silvestre.

Economía: La contaminación por plásticos también tiene un impacto económico.

En resumen: Aunque la OMS no ha mencionado explícitamente el 50% como la proporción de plástico en la contaminación, sí ha enfatizado la magnitud del problema de la contaminación plástica y su impacto en la salud humana y el medio ambiente.

Recientes estudios han demostrado que el plástico, específicamente microplásticos y nanoplásticos, ha llegado al cerebro humano. Estos estudios han encontrado que las partículas de plástico se acumulan en el cerebro en niveles más altos que en otros órganos como el hígado y los riñones. Los investigadores han detectado un aumento significativo en la concentración de micro y nanoplásticos en muestras cerebrales de 2024 en comparación con muestras de 2016.

Los microplásticos son fragmentos de plástico de menos de 5 milímetros, mientras que los nanoplásticos son aún más pequeños (de 1 a 1000 nanómetros).

¿Cómo llegan al cerebro?: Estos micro y nanoplásticos pueden ingresar al cuerpo a través de la ingesta de alimentos y agua contaminados, así como por inhalación. Una vez dentro, se transportan por el torrente sanguíneo y pueden acumularse en varios órganos, incluyendo el cerebro.

Un estudio reciente publicado en Nature Medicine encontró que las muestras de cerebro humano de 2024 tenían casi un 50% más de microplásticos que las muestras de 2016. Los investigadores detectaron niveles más altos de microplásticos en el cerebro que en el hígado y los riñones.

Aunque las posibles implicaciones para la salud humana aún se están investigando, los hallazgos ponen de relieve la presencia de microplásticos en el cerebro y su potencial impacto.

En resumen, lo que les puedo decir es que la contaminación por microplásticos en el medio ambiente ha aumentado exponencialmente en los últimos 50 años, lo que se traduce en un aumento en la concentración de microplásticos en el cuerpo humano, incluyendo el cerebro.

Otro hallazgo notable fue que los niveles de MNP eran entre tres y cinco veces superiores en 12 cerebros de personas a las que se había diagnosticado demencia. Los investigadores aclaran que esto no significa necesariamente que los PNM causen demencia, pero muestra una asociación que debería estudiarse más a fondo.

Los microplásticos y nanoplásticos (MNP) pueden ser invisibles a simple vista y proceden de productos plásticos de mayor tamaño (como botellas de refrescos, bolsas de la compra y envases de poliestireno) que se descomponen en el medio ambiente.

La comunidad científica lleva estudiando los MNP en los océanos desde la década de 1970. Se ha descubierto que los animales marinos tienen microplásticos en sus cuerpos, absorbidos del agua y por comer pescado contaminado. Los microplásticos también se acumulan en los tejidos de otros animales que comemos, como cerdos, vacas y pollos.

Los MNP también pueden acabar en el aire: el aire en interiores tiende a contener más MNP que el aire exterior, debido al desprendimiento de partículas de los plásticos de la ropa, muebles y productos domésticos. Después de inhalar estas partículas, pueden viajar por el cuerpo y acabar en varios órganos. Numerosos estudios han encontrado PNM en pulmones humanos, placentas, vasos sanguíneos y médula ósea.

Un estudio de 2024 encontró pruebas de que los MNP son capaces incluso de atravesar la barrera hematoencefálica, un filtro selectivo que controla lo que puede entrar en el cerebro desde el torrente sanguíneo. Aunque anteriormente se pensaba que sólo los nanoplásticos más pequeños podían atravesar esta barrera, este estudio descubrió que los microplásticos de mayor tamaño también pueden entrar en el cerebro y en síntesis al paso que vamos, un día nos encontraremos con la novedad de una nueva y mortal enfermedad, ocasionada por inhalar partículas de micro y nano plásticos (MNP)…si esto no nos asusta, entonces esperemos a ver que caiga la gente idiotizada por el consumo de estas sustancias desprendidas por el plástico…hasta el lunes

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