CON PRECAUCIÓN
Lo hecho, hecho está y ya ni llorar es bueno
Por Sergio Mejía Cano
Pues como se dice coloquialmente: lo hecho, hecho está y ya ni llorar es bueno. Esto en cuanto a la aprobación en lo general y en lo particular de la reforma al Poder Judicial, así que ya nada más falta que sea aprobada por lo menos por 17 congresos estatales para que se publique en el Diario Oficial de la Federación.
Durante varios días desde antes de que se debatiera esta reforma en la Cámara de Diputados, varias personas inconformes y que tal vez presentían que no habría marcha atrás, bloquearon dicha Cámara para impedir el acceso de los diputados federales a su recinto, por lo que se tuvo que buscar una sede alterna en donde fue aprobada esta reforma, para en lo sucesivo pasar al Senado de la República, para cumplimentar la instancia necesaria.
Y si bien las personas inconformes por la posible aprobación de esta reforma, tal vez azuzados y engañados con el cuento de que se perdería la carrera judicial, así como infinidad de bases laborales; engañados precisamente, se dice y se ha documentado, por quien encabeza el Poder Judicial: la ministra presidenta de la Suprema Corte Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña Hernández y otros ministros, los que, obviamente lo único que les ha interesado es no perder sus privilegios y prebendas, muchas de ellas ofensivas para el grueso de la población. Así que, por lo mismo, movilizaron a la mayoría de los trabajadores del Poder Judicial y, se dice, que hasta a gente externa a dicho Poder, con la posibilidad de que hayan estado presentes también agitadores, gente que si no bloqueó la entrada a los senadores de ambos sexos al recinto donde debatirían, sí se metieron a la fuerza cuando ya estaban sesionando los senadores.
Al irrumpir infinidad de personas en el inmueble de la Cámara Alta e interrumpir la sesión, lo hicieron con lujo de violencia haciendo muchos destrozos en el edificio y gritando consignas supuestamente para tratar de parar la aprobación de la reforma, pues ya se intuía que sería inminente la aprobación, pues varios analistas políticos mencionaban la posibilidad de que por lo menos un senador de la oposición votaría a favor de la reforma, para completar así los 86 senadores necesarios para dicha aprobación. Así que debido a la violencia manifiesta por los que irrumpieron en la Cámara de Senadores, a estos no les quedó de otra que llevar a cabo la sesión en una sede alterna y, qué mejor que la antigua Cámara de Senadores en Xicoténcatl.
Tal vez no sea muy descabellado decir que todo esto se orquestó por la cúpula del Poder Judicial, porque después que se aprobó la reforma por los diputados de inmediato salieron voces a decir que no era legal porque se había sesionado en una cancha deportiva y que quienes habían votado a favor no habían sido los diputados en su totalidad, sino que habían sido choferes y acarreados; sin embargo, esto no prosperó debido a que se comprobó que al momento de votar todos y cada uno de los diputados de ambos sexos, pronunciaron su nombre y su distrito de acuerdo a la entidad federativa a la que pertenecen.
Y como este desaguisado no pudo ir más allá, tal vez quisieron hacer algo similar en la Cámara de Senadores, pero como no se pudo, de ahí la irrupción y violencia que se hizo manifiesta en ese recinto, una violencia que ahora circula en las redes sociales mediante fotografías y videos en donde claramente se observa el lujo de violencia no nada más de supuestos trabajadores del Poder Judicial, sino de acuerdo a varios analistas y periodistas como Álvaro Delgado Gómez y Alejando Páez Varela, se ven en esas fotos y videos a juzgadores y otros personajes fácilmente identificables.
Ahora queda que se presente una denuncia de hechos por los destrozos ocasionados a la Cámara de Senadores, pues se dañaron puertas y tal vez algún tipo de mobiliario. Esto no puede quedar así nomás, es necesaria una denuncia por los daños causador y apresar y juzgar a quién o quiénes resulten responsables por estos hechos vandálicos.
Así que, tal y como se dice históricamente cuando supuestamente un allegado a don Benito Juárez, al ver que Juárez titubeaba al dar luz verde para fusilar a Maximiliano de Habsburgo, le espetó fuertemente a Juárez: ahora es cuando, señor presidente, para demostrarle al mundo que con la soberanía de México no se juega. No cito la frase exacta porque no pude encontrar la anécdota. Lo que sí es un hecho es que, ahora es cuando no se debe permitir que haya impunidad hacia los vándalos que dañaron el recinto de la Cámara Alta.
Sea pues. Vale.
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