Los sordos oyen

LA SERPENTINA

POR GUILLERMO AGUIRRE

**Pues vaya obra del DIF en beneficio de los sordos, les entrega aparatos auditivos que mejoran su vida personal, su desarrollo social, educativo y laboral promoviendo una mejor calidad de vida.

Retomo un fragmento de un conocido pasaje bíblico que ocurre en el marco de unos discípulos de Juan el Bautista, enviados por él, a preguntarle a JESÚS, que sí él era el Mesías que había de venir o que si seguían esperando al ansiado enviado de Dios, previamente estos discípulos de JUAN EL BAUTISTA, anduvieron siguiendo a JESÚS, mezclándose entre la multitud que a diario acompañaba al Maestro, así que cuando los enviados por EL BAUTISTA, le hicieron esa pregunta a CRISTO, JESÚS, para obviar las explicaciones sobre su origen mesiánico les contestó diciendo: “Decidle a vuestro maestro lo que habéis visto, los ciegos ven, los cojos andan, y los sordos oyen…”.

Simplemente nadie que no fuera el esperado Mesías, el hijo de Dios, no podría hacer tales señales milagrosas, por eso la respuesta de JESUCRISTO, fue relacionada con lo que a diario hacía.

Ahora bien, me referiré por este día a los ciegos, no porque el resto de milagros maravillosos no sean importantes, sino porque durante mi vida he conocido a muchos sordos, algunos que de plano perdieron la audición, es decir el oído en forma total, otros que perdieron sólo un oído, otros más que oyen poquito y hay que gritarles casi al borde de su oreja para que medio capten lo que uno quiere decirles, pero en general, todos los que sufren por la falta de este órgano, se pierden de grandes maravillas del cuerpo humano.

Por ejemplo, no pueden entablar un diálogo con alguien porque no saben que es lo que les está diciendo, ciertamente ahora hay técnicas para que los sordos lean los labios de las personas, pero pues que suplicio estar viendo como se mueve la boca para medio adivinar la palabra que se está expresando.

Pero no es sólo esto, el estar sordo lleva el riesgo de no escuchar un peligro inminente, digamos como el sonido del crujir de las columnas de concreto de un edificio cuando ocurre un terremoto, de manera que, si un sordo se encuentra sólo en alguna oficina o edificio, y ocurre una tragedia de gran magnitud, seguramente sufrirá las consecuencias.

En caso de un incendio en casa habitación, y que todos estén dormidos, si alguien da el grito de alarma para salir todos y evitar el peligro, el sordo seguramente será el ultimo en salir, máxime si se encuentra dormido en alguna habitación particular, o personal.

Escuchar la cantarina voz de tu madre cuando te hace un cariño verbal, la voz firme de tu padre, cuando te da una indicación, la voz de tus hermanos cuando juegas algún juego de mesa, la voz de tus amigos cuando éstos juegan un partido de un determinado deporte, pero obvio que el sordo no puede participar porque no puede interactuar con el grupo debido a su sordera.

Por eso no cabe duda que sería injusto no reconocer lo valioso que resulta que El Sistema DIF Nayarit, presidido por la doctora Beatriz Estrada Martínez, haya entregado 165 aparatos auditivos para beneficio de 94 personas de los municipios de Acaponeta, Ahuacatlán, Compostela, Rosamorada, Santiago Ixcuintla, San Pedro Lagunillas, Tuxpan, Xalisco y Tepic.

Estas entregas tienen como objetivo mejorar la salud y la calidad de vida de las familias nayaritas, ahora bien, no crean que estos costosos aparatos se entregan a mansalva, o en forma indiscriminada, para nada, pues antes de recibir los aparatos, cada paciente pasa por una valoración realizada por un especialista en audiología, quien determina el grado de pérdida auditiva y ajusta el dispositivo para optimizar su situación auditiva, luego se les otorga el dispositivo auditivo para que mejoren su vida, y vaya que los testimonios de las personas que han recibido tales dispositivos o aparatos auditivos, son de gran agradecimiento por los beneficios que tienen ahora que oyen de todo.

Desde luego que para los que toda la vida hemos gustado al máximo de este sentido del cuerpo humano, me refiero al oído, quizá el saber que algunas personas más, ya oyen, no sea de impacto para nosotros, pero pues sólo es cosa de preguntar y preguntarnos, lo que pasaría si nos dieran algo de lo que carecemos en nuestro cuerpo, digamos como un páncreas a los diabéticos, un nuevo riñón a los que ya reciben diálisis, un nuevo corazón a los que tenemos la mitad del mismo funcionando o en algunos casos, ya traen válvulas para ayudar a su corazón.

En fin, lo cierto es que el DIF Nayarit se compromete para trabajar por el bienestar de la comunidad. Estos aparatos no solo mejoran la vida personal, sino también su desarrollo social, educativo y laboral, promoviendo una mejor calidad de vida. Con cada entrega, se fortalece el propósito de construir una sociedad más justa y solidaria, así de sencillo para que se entienda rápido y bien…hasta mañana