Engañando al jefe

LA SERPENTINA

POR GUILLERMO AGUIRRE

Engañando al jefe

**Luego de que le preguntaron al presidente sobre los hechos ocurridos en Texcaltitlán, estado de México, el enfrentamiento entre narcos y población, su respuesta fue que este hecho violento es una excepción, porque el recibe a diario reportes de que todo está bien en el país

Me chuté o sea vi la conferencia mañanera del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, más de dos horas de escuchar temas de todo tipo, informes, gráficas especialmente de seguridad, muchas preguntas sobre seguridad, la escuela de tiempo completo, en pocas palabras de todos los asuntos que en primer lugar le interesan al presidente dar a conocer desde su punto de vista, y luego  en la sección en donde les dan oportunidad a los reporteros de preguntar, de los asuntos que a éstos o a sus periódicos les interesan.

Por ello, me sorprendió cuando luego de una hora con 59 minutos, y 47 segundos, el jefe de la nación le dio oportunidad a una reportera de nombre Reina, “a ver Reina”, dijo LÓPEZ OBRADOR, para darle oportunidad a la dama, y fue entonces que sorprendentemente la comunicadora que traía varias hojas de papel dobladas, soltó una serie de datos sobre la inseguridad en México.

Sacó a relucir que por ejemplo en el estado de Sonora, la delincuencia organizada, ya domina gran parte de la entidad, no sólo Cajeme, dijo la señora Reina, citó luego al estado de Guerrero, a Tamaulipas, a Michoacán, y desde luego al reciente caso de Texcaltitlán en el estado de México, en donde hartos de ser víctimas de la extorsión, los pobladores tuvieron que enfrentarse a sus verdugos y extorsionadores, con el saldo ya conocido de 11 delincuentes muertos, y 3 pobladores del Texcaltitlán, aparte de varios heridos, algunos de ellos internados y atendidos medicamente.

Ante la pregunta, lo que sorprendió a todos los reunidos en palacio de gobierno, fue que el presidente contestó que la seguridad en México estaba muy bien, e incluso citó como testimonio de que el país anda bien en este rubro, una gráficas y unos datos exhibidos precisamente por los responsables de la seguridad, en donde todos los dibujos y líneas, indican que vamos para abajo en materia de delitos, hay menos asesinatos, menos delitos de todo tipo, menos robos, en pocas palabras, de acuerdo a los datos de los trabajadores de LÓPEZ OBRADOR, en México, no pasa nada, o pasa muy poquito y todo está controlado.

Del caso reciente y que se supo en gran parte del mundo por las noticias que hoy corren a través de la redes, me refiero al épico enfrentamiento de ciudadanos contra narcos, en Texcaltitlán, estado de México, el presidente dijo que era un hecho aislado, que era apenas la excepción, de toda la tranquilidad y paz que se respira en el país.

Luego dijo que él se reunía todas las mañanas a las seis de la mañana con sus gentes de seguridad y ellos le informaban lo que pasaba en México, y hasta este momento todo está tranquilo, y que además esas reuniones a las seis de la mañana de lunes a viernes, servían para mantener la seguridad en la nación.

No imaginé que la señora Reina, la reportera que ya mencioné, tuviera tantas agallas como para decirle al presidente que de qué servían esas reuniones diarias, si el país seguía sufriendo a la delincuencia y no se notaba que las cosas mejoraran con todo y a diario recibir reportes,  o bien estos reportes no eran muy precisos.

Como es natural, el presidente tuvo que echar mano de sus recursos favoritos, y decirle a Reina, que el tiempo que ha pasado es poco para lograr extirpar a la delincuencia y al narco estado que le dejó FELIPE CALDERÓN, pero que ahí van poco a poco limpiando al país.

Lo peor de la acusación de la periodista Reina, fue cuando dijo que la población se está dirigiendo a los narcos o en general a la delincuencia organizada, para pedirles favores, incluso situaciones de justicia, en lugar de acercarse con las instituciones oficiales.

Sin duda la pregunta lapidaria de esta señora fue cuando dijo: “Donde está el estado señor presidente”, y sin duda que esto no puede caerle bien a ningún mandatario, así que el jefe del poder ejecutivo, empezó a echarle la culpa de este tipo de informaciones sobre inseguridad, a los medios de comunicación, que en lugar de estar haciendo un buen trabajo de acatar las cifras oficiales, supongo, “andan en lo suyo”, según las propias palabras de LÓPEZ OBRADOR.

Pero la única deducción clara que nos puede quedar, es que los que informan sobre seguridad a diario al presidente de México, o no le informan todo, o ellos tampoco son informados de los hechos de violencia que ocurren a diario en todo el país.

Porque decir que los hechos de Michoacán, Guerrero, Sonora, y el Estado de México, son apenas excepciones, o sea hechos aislados, es para creer que los subalternos, están engañando al jefe, como se estila en muchas empresas, y eso sería lamentable…hasta mañana

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