CON PRECAUCIÓN
Hallazgos que hacen dudar sobre la veracidad del rancho Izaguirre
Por Sergio Mejía Cano
Sin demeritar en ninguna forma toda la información vertida sobre los descubrimientos recientes en el rancho Izaguirre, en el municipio de Teuchitlán, en el estado de Jalisco, hallazgos que dieron pie a que se elucubrara la idea de que fue un campo de exterminio, de adiestramiento y de encerrar a muchos de los jóvenes de ambos sexos denunciados como desaparecidos o no localizados, surgen algunas dudas en cuanto a la veracidad de todos los acontecimientos de los que se han informado.
Desde hace ya algún tiempo, en medios informativos de la ciudad de Guadalajara, Jalisco, cotidianamente se comenzaron a dar noticias respecto a jóvenes que, al llegar a la central camionera que se ubica en el municipio de Tlaquepaque, de pronto sus familiares dejaban de estar en contacto con estos jóvenes. En varias de las noticias se decía que, de acuerdo a testimonios de algunos familiares, sobre todo de otras entidades cercanas al estado de Jalisco, afirmaban que sus jóvenes habían visto en portales de internet oportunidades de trabajo y en caso de aceptar deberían de llegar a la central camionera de la zona conurbana de Guadalajara, para ya ahí ser transportados o llevados a los centros de trabajo en donde se requerían sus servicios.
Incluso, ya más recientemente, de acuerdo a las noticias vertidas en varios medios de comunicación se decía que se habían rescatado a varios jóvenes que deambulaban en las inmediaciones de dicha central camionera, algunos esperando la hora de la cita en que se verían con los supuestos empleadores, empleadores que nunca se hicieron presentes tal vez al mirar a los muchachos o muchachas ya siendo acompañados por autoridades.
Con el hallazgo de vestigios de supuestas fosas clandestinas, así como la posibilidad de hornos crematorios ídem, así como infinidad de prendas de vestir, mochilas y calzado de varios tipos, hubo quien llegó a pensar que muchos de los jóvenes con denuncia de desaparición pudieron haber estado en ese lugar y, lo peor, que hayan sido asesinados y hasta quemados.
El problema en cuestión es que, de acuerdo a otras informaciones, este rancho ya había sido asegurado y revisado desde el pasado mes de septiembre del año pasado y que no se había encontrado nada de lo que después apareció, por lo que de inmediato surgieron las dudas al respecto; aunque posteriormente se dijo que desde aquel mes de septiembre, tal vez no se hayan realizado búsquedas a fondo, sino hasta que se hicieron presentes grupos de personas que se han conformado en grupos de búsqueda por todo el país, grupos que fueron los que encontraron ahí todas las supuestas evidencias que se hicieron públicas ya a nivel nacional.
Supuestas evidencias, porque si bien, se dijo que existía la posibilidad de haber sido un campo de extermino, lo que de inmediato se dio un nado sincronizado en la mayoría, si no es que en todos los medios de manipulación y hasta en otros más serios, tratando de dar la impresión de que este hecho era el primero y único y, desde luego, atribuyéndolo a la actual administración de la presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo debido a su supuesta falta de capacidad para combatir al llamado crimen organizado; acusación que de inmediato cae por tierra, pues si algo ha demostrado esta actual administración federal es su lucha incansable contra estos grupos y demás cuestiones de inseguridad, demostrando cada cierto tiempo en sus conferencias matutinas los avances a este respecto.
Se entiende que un criminal o criminales que se precien de serlo no se pueden dar el lujo de dejar evidencias de sus malos actos, que no pueden dejar cabos sueltos y menos prendas de vestir, así como utensilios de uso personal como mochilas, porque en determinado caso, muchos de estos artículos se podrían rastrear en caso de una investigación de inteligencia a fondo, llegando a saber incluso en dónde se fabricaron las prendas de vestir o calzado, en donde se distribuyeron para su venta y en dado caso, cuándo y en que ciudad o población fue su venta.
En cuanto a la cantidad de calzado que aparentemente se encontró es el rancho Izaguirre, esto hizo que algunos de estos medios de desinformación, así como algunos políticos de la diezmada oposición, compararan este rancho con el campo de concentración famoso en la segunda guerra mundial: Auschwitz. Olvidando que, si llegaron a quemar gente, pues nada más fácil que también quemar su ropa, calzado y las mochilas, así como unas cobijas que al parecer son prácticamente nuevas con poco o sin uso.
Sea pues. Vale.
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