Prohibido prohibir

CON PRECAUCIÓN

Prohibido prohibir

Por Sergio Mejía Cano

Gran parte de los nayarita e hijos adoptivos de Nayarit aceptaron con gran beneplácito el que oficialmente se hayan prohibido los denominados corridos tumbados, así como canciones alusivas al narcotráfico y la violencia, algo que ya se ha hecho en otras entidades de nuestro país; sin embargo, a una pregunta que se le formuló al respecto a la presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo en una de las conferencias matutinas, ella afirmó no estar de acuerdo a esta prohibición por la frase ya acumulada de prohibido prohibir.

Aunque sí señaló también que no está de acuerdo al contenido de las letras de muchas de esas canciones, sobre todo las que denigran a la mujer y se consideran como discriminatorias, por lo que en un evento próximo se emitirán corridos tumbados, pero con otra letra, en el entendido también de que es muy difícil prohibir algo que esté ligado con la música, pues dentro de esta está la libertad de expresión; aunque claro está, con determinados límites.

Se entiende que no hay peor lucha que la que no se hace, el problema es que hasta el día de hoy la mayoría de las prohibiciones y hasta sugerencias sobre qué hacer o qué no hacer no han dado los resultados esperados ¿por qué? Pues se podría decir que todo está en los hogares, en las familias en donde se supone se maman los valores y principios morales y éticos.

Así que, por ejemplo, en los estados de la República Mexicana en donde ya tiene tiempo que se prohibió la creación, reproducción y emisión de música relacionada con violencia, drogadicción, misoginia, discriminación y hasta en ciertos casos racista, de todos modos, de algún modo hay gente que las sigue oyendo y escuchando ya sea en grabaciones en memorias y, ya no se diga en películas y en conciertos que se trasmiten a través de las redes sociales. De ahí lo difícil de que una prohibición de este tipo prospere y cumpla las expectativas que se requieren, pues siempre habrá algún modo de que todo tipo de música que se llegue o se llegara a prohibir se escuche por otros medios y en otros lugares.

Ahora bien, se entiende que, como para todo hay gente, las letras de las canciones que no gustan a alguien a otras personas que les llamen la atención ya sea para reflexionar sobre qué hacer o no hacer o en cierta forma de estudio para tratar de entender por qué, quien compuso determinada letra de una de estas canciones lo hizo o para qué, si fue por experiencia propia, porque le dieron la idea o es su modus vivendi, etcétera.

El que las letras de algunas canciones molesten u ofendan a alguien o que se sienta aludido no es de ahora, sino prácticamente desde siempre, pero antes mucha gente no era tan quisquillosa como hoy en día en que hasta les molesta que tomen como discriminatorio decirle a alguien negro o negra; he ahí el caso de los Estados Unidos que hasta ahora se dieron cuenta de que la palabra “indios” era ofensivo, de ahí que le hayan cambiado el nombre al equipo de béisbol, los Indios de Cleveland y de que ahora algunas películas también se les hagan ofensivas si tratan asuntos de la esclavitud o que es malo que en una película supuestamente para el público infantil como “ET” aparezca un arma de fuego en el cinturón de un oficial de policía, etcétera.

Así que, si a esas vamos, entonces habrá infinidad de películas y canciones que tal vez no tarden en prohibirlas también, ya que si no se quiere que se hable sobre drogas, se entiende que el alcohol también es una droga cuando está en algunas de las bebidas embriagantes, así que en este caso se deberían de prohibir todas esas canciones que hacen alusión a la embriaguez, pues si se dice que las cancines que hacen alusión al consumo de estupefacientes incitan a muchas personas a adentrarse en las drogas, entonces igual que se haga con las canciones de borrachos; claro que muchas de estas canciones ya casi no se oyen más que en películas o en discos pasados a memorias, pero aun así, porque volvemos a que todo está en los hogares, en los padres de familia, ya que si en una casa se escucha el tipo de música que se ha prohibido en eventos, programaciones de radio y televisión, etcétera, las nuevas generaciones las oyen en sus domicilios, por lo que es obvio que crecerán con la idea de lo que escuchan en sus propios hogares.

¿Quién no ha visto a sus familiares ingerir bebidas embriagantes ya sea en su propia casa o en festejos? Así que si alguien crece viendo todo esto, pues es obvio que se le hará como algo normal seguir el ejemplo que ven en sus adultos.

Sea pues. Vale.

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