CIR Informativo

Compartimos Información Relevante

Probable resentimiento de algunos fundadores de Morena

CON PRECAUCIÓN

Probable resentimiento de algunos fundadores de Morena

Por Sergio Mejía Cano

Es posible que la inclusión del señor Sergio Mayer Bretón a las filas de Morena acreciente el resentimiento de muchos de los fundadores del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que fueron relegados para darle espacio a los advenedizos que nunca faltan. Pero no nada más por la inserción de Sergio Mayer, sino también de Javier Corral y otros más que en el pasado se distinguieron, perteneciendo a otras asociaciones políticas, por despotricar en contra de los militantes de Morena e incluso de su cofundador: Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

El resentimiento de quienes ayudaron a fundar un movimiento encabezado por AMLO, que después se convirtió en partido político y que logró llegar a ser ahora mayoritario, es más que legítimo, pues los hicieron a un lado para darles posicionamientos a personajes supuestamente con más capacidad y experiencia política, pero que no sudaron la gota gorda luchando y participando en la fundación de un movimiento que ha logrado llegar a muchos mexicanos.

Y a propósito de capacidad y experiencia política, ¿cuál es la que ostenta Mayer Bretón? Nada más haber sido en cierta forma popular al haber incursionado en un grupo musical, participar como exhibicionista en la farándula y el espectáculo, aparecer en algunos programas televisivos y una que otra película y pare usted de contar; ah, y haber ocupado una curul como diputado en el trienio de 2108-2021, por mayoría relativa. Cargo en donde por supuesto no pasó de ser del montón, pues no destacó en tribuna y si llegó a presentar alguna iniciativa de ley, esta no destacó o trascendió; pero que haya destacado con un buen político en ciernes, para nada, sino más bien se dio a conocer como un acomodaticio más de la política mexicana, tal y como ha resultado ser hoy en día en nuestro país esa pléyade de aparentes políticos que nunca llegan o han llegado a comprender lo que esto significa.

Esto de que en Morena, pero sobre todo su actual dirigente, Mario Delgado Carrillo, se les esté abriendo las puertas a dizque políticos que, perteneciendo a otros partidos políticos se dieron a conocer en contra de Morena, sus integrantes y sus iniciativas y que ahora ya estén muy conformes integrándose a este movimiento que, de seguir así, si no desaparece como el casi extinto, Partido de la Revolución Democrática (PRD), al menos sí llegará a ser lo que ya mucha gente predice: que Morena ahora es el Primor; y que es o sería ya primor y no “morpri”, porque quienes ahora engrosan más las filas morenistas son priistas y no morenistas de nuevo cuño; inclusive su principal fundador: AMLO. Y, como se dice que un priista nunca deja de ser priista, pues he ahí al nuevo PRI que, como el ave Fénix, resurge de sus cenizas, pero ahora ya no tricolor, sino con otro plumaje de color guinda.

Sin embargo, no nada más los priistas que ahora engrosan las filas de Morena son los que podrían hacer revivir al PRI anterior, sino también panistas y perredistas que, tal y como señaló alguna vez la señora, Tatiana Clouthier Carrillo: de vez en cuando nos sale a todos los mexicanos el priista que llevamos dentro. Y esto porque la mayoría de los mexicanos de ambos sexos nacimos dentro de la hegemonía priista que si bien su abuelo fue el Partido Nacional Revolucionario (PNR) que devengó posteriormente en el Partido de la Revolución Mexicana (PRM), terminó siendo el PRI. Así que todos los mexicanos que nacieron en los años 20 del siglo pasado y quienes nacimos después, crecimos dentro de esa hegemonía priista; incluso los fundadores del Partido Acción Nacional (PAN).

La prueba fehaciente de que también los panistas en el fondo han sido también priistas, he ahí los 12 años que presidió a este país el PAN con Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa que, no fue sino una calca corregida y aumentada del PRI, resultando ser peores administradores que los otros priistas de nombre y convicción.

Así que resulta bastante triste ver y comprobar cómo la mayoría de los neo políticos que lucharon hombro con hombro para la conformación de Morena hayan sido relegados a segundo plano, otorgándoles más cargos y comisiones a políticos advenedizos que por lo que se ve y es muy probable, lo único que pretenden es su propio beneficio y no pasar a vivir en el error, es decir, fuera del presupuesto.

Si Morena quiere afianzarse más entre el pueblo de a pie, tendrá que deshacerse de ese lastre de emisarios del pasado (Luis Echeverría Álvarez, dixit), y dar paso a los políticos de nuevo cuño.

Sea pues. Vale.

About Author