Avisos contra el ego

LA SERPENTINA
POR GUILLERMO AGUIRRE

**Con mucha claridad y sabiduría, advierte la secretaria de Educación Pública, Mirna Manjarrez, que ninguna escuela ni padres de familia, están obligados a hacer fiestas de graduación

Pues me da mucho gusto que la maestra y secretaria de Educación Pública, MIRNA MANJARREZ VALLE, haya sido muy clara en lo concerniente a las graduaciones en educación preescolar, primaria y secundaria, es decir a la educación básica de las escuelas públicas.
De entrada, la titular de la SEP, en el estado, dijo que ninguna, léalo bien, ninguna escuela pública, esto es, del gobierno, está obligada a realizar eventos de graduación, se refiere por supuesto a esos majestuosos eventos en donde los de por sí oprimidos económicamente, padres de familia, tienen que gastar en un costoso vestido de graduación, de esos largos y de diseño, tienen que pagar la renta de un casino, mismos que obviamente por la época en la que nos encontramos, que son los tiempos en que todas las escuelas tienen sus graduaciones, se ponen más caros, y más difíciles, y claro, los padres de familia, con tal de tener un buen lugar para festejar a sus hijos que salieron de un simple ciclo educativo, no se graduaron de nada, es decir no reciben un título profesional, sólo brincan de un nivel a otro, pues son capaces de pagar lo que les pidan, claro, con costo a ellos mismos.
Pero espérenme, no han acabado los gastos, porque luego viene la contratación de un grupo musical para que amenice el buen rato y festeje que el niño o niña, salió del kínder, conocido hoy como de prescolar, o salió de la primaria, y va para la secundaria.
Pero que se no me pase que los padres de familia, tienen que llevar la botana, las comidas, las ollas, las cazuelas, con esos alimentos que tienen que dar abasto a todos los invitados del egresado de primaria o secundaria.
Ah, pero existe la posibilidad de que nadie lleve nada, entonces se contrata el servicio de meseros y comida, lo que por supuesto aumentará el costo del evento y de paso que no se nos olvide el costo de las bebidas, que en el caso de los alumnos, si éstos son menores de edad, si bien ellos le entrarán a las coca colas, o a otros refrescos, algunos padres por presunción, no dudarán en llevar una botellita de whisky, o de alguna otra bebida embriagante, así que añádale otro gastito mas.
Claro que hay otros gastos obligados, el vestuario de los padres, calzado, zapatillas, zapatos nuevos en los hermanitos y hermanitas, maquillajes, peinados, y mire, todo para unas cuantas horas, el vestido de graduación que regularmente es largo, queda en el olvido, mientras que las deudas siguen pendientes, pues a veces se tiene que pedir un préstamo a bancoppel, o a banco azteca,
Ahora bien, usted y yo sabemos que las fiestas son para engordar la vanidad y quizá el vacío emocional de algunos padres de familia, que con llevar las mejores botanas, comidas, zapatos, vestidos y bebidas, alimentan su ego, y de paso, favorecen que su hijo o hija, se considere merecedor de premios por todo lo que ocurra en su vida, y llegado el momento en que ya no hay premios porque ya no hay capacidad económica, o porque hubo disolución del matrimonio, o porque simplemente a nadie le interesa si el muchacho o muchacha, salió o no de la escuela, entonces vienen los problemas existenciales.
En realidad, estos festejos inútiles, y que regularmente los proponen madres que son las que tienen hijos que apenas pudieron salir con el mínimo de calificación, son para alimentar el ego de las madres o padres en menor caso, no para satisfacer el gusto del estudiante que sale de preescolar, primaria o secundaria, ya que a esta edad, lo menos que le interesa a un chico que cuando mucho tiene 14 o 15 años, hablo de los que están en secundaria, lo que menos les importa es una fiesta de graduación.
De hecho, los padres debieran hablar con sus hijos o hijas, y preguntarles, si les interesa que les hagan una gran fiesta con banquete y música, porque salieron del kínder o de la primaria o secundaria.
Por eso, reconozco lo oportuno del mensaje de la maestra MIRNA MANJARREZ VALLE, para que ningún padre tome como bandera que la SEP exige un evento de graduación, para nada, la SEP, lo que quiere es que los papás no gasten mucho en la salida de la escuela de sus hijos.
Miren, una foto con el grupo, otra foto personal, y listo, a seguir en el siguiente nivel.
Y finalmente, si un papá quiere festejar a su hijo, pues que le haga su fiesta y que invite a los que él quiera para que les presuma que hoy su hija ya salió del kínder, y está lista para ser abogada o doctora, o lo que se le ocurra, total todavía faltan 17 años más de estudio para finalizar una carrera profesional.
¡Bien por la secretaria de Educación Pública, evitará muchos gastos de dinero que no tienen los padres! hasta mañana